
Realizaremos entre 8 y 15 repeticiones de cada ejercicio.
Al terminar un ejercicio pasamos al siguiente.
Repetiremos 2 o 3 vueltas al circuito.
Es importante la respiración. Como consejo, suelta el aire en la parte del movimiento en la que se hace un mayor esfuerzo. Siempre es recomendable calentar antes de comenzar y estirar al finalizar.
Al realizar el ejercicio sin supervisión, hay que tener en cuenta que ningún ejercicio nos cause dolor, evitando posibles lesiones.

De pie, detrás de una silla, con la espalda recta y las manos apoyadas en el respaldo de la silla. Flexiona las rodillas hasta el punto que nuestra movilidad nos permita. Realizamos el ejercicio despacio y sin perder equilibrio.

Apoyando ambas manos en la pared, flexiona y extiende los brazos. Cuando más nos alejemos de la pared, mayor dificultad, y cuando más nos acerquemos, menor.

Agarrados a una silla o mesa, extendemos la pierna hacia atrás.
Después realizamos las repeticiones con la otra pierna.

De pie, ligeramente inclinado y apoyando una mano sobre una silla o mesa.
Agarra con la otra un peso (mancuerna, botella de agua..) y eleva el brazo llevándolo lo más cerca del cuerpo posible, elevando el codo.

De pie, cogidos del respaldo de una silla o mesa, eleva los talones hasta quedar de puntillas y volver a posición inicial. Primero los dos pies juntos a la vez, a continuación, alternando primero con un pie y al bajar subir el otro talón

Con un objeto en cada mano (pesa, botella de agua,…) y brazos extendidos a lo largo del cuerpo, eleva los brazos estirados, sin sobrepasar la altura de los hombros.
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